Delito contra la Administración Pública que se concreta cuando un funcionario público le da a los caudales públicos o efectos que administra una aplicación diferente de aquella a que están destinados y por el hecho, resulta daño o entorpecimiento del servicio a que están destinados. CP, Art. 260, Parte. 2.
Delito que comete un funcionario público cuando usa caudales públicos o efectos que administra para algo a lo que no están destinados y por el hecho hay daños o entorpecimiento del servicio a que están destinados.